MaquinariaTornillo a tornillo, pieza a pieza y rueda a rueda, estamos construyendo La Máquina, conectándola a nuestras vidas de forma descontrolada. Cada cable se introduce más profundamente su metal bajo la piel de nuestra sociedad, convirtiéndonos en adictos a su aceite. Estupidamente, creemos que tenemos el control de esta Máquina, pero lo cierto es que si la máquina se para, nosotros nos paramos.
2 comentarios:
¿Qué opinas del estado actual de las reservas de combustibles fósiles, en relación con el aumento exponencial del consumo de petróleo en Asia? ¿No te parece que a corto plazo podemos asistir a un cambio de tal magnitud que transforme la sociedad a nivel mundial? (Me refiero a un cambio de paradigma, a un giro copernicano debido al desequilibrio de la balanza de la oferta y demanda tal y como se ha mantenido hasta hoy; ¿podría esto llegar a demostrarnos cuán dependientes somos de ciertas máquinas?)
Saludos
PARABELLUM
No he oido mucho sobre ese tema, pero que se va a producir un cambio tal es evidente. Si no detenemos ya esta vorágine consumista, no nos queda mucho sobre este planeta. Pero, por otra parte, necesitamos seguir prograsando en los ámbitos tecnológicos para encontrar la forma de salvarnos de nosotros mismos. No son la falta de reservas nuestro mayor enemigo, somos nosotros y, ahí, si que hace falta un giro de 360º y, en mi opinión, la investigación de campos como la energía cuántica que desvelen como funciona la Gran Máquina que es la realidad, es lo que nos puede salvar. Pero para esto, me temo que el progreso no se puede frenar de buenas a primeras, aunque si que hace falta guiarlo con inteligencia.
Un saludo
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